Hay personas que sufren pérdidas auditivas tratables con audífono y que frenados por el pudor o vergüenza que les supone llevar este dispositivo rehúsan utilizarlos. Actualmente existen audífonos muy discretos y que ayudan notablemente a recuperar la audición en personas con problemas auditivos, mejorando con ello su relación con los suyos y su entorno y por tanto su calidad de vida.
Hoy en concreto nos vamos a centrar en los audífonos invisibles. Con el término audífonos invisibles se hace referencia a los audífonos, que por su pequeño tamaño, diseño y su colocación, pasan totalmente imperceptibles para las personas de alrededor.
Se trata de audífonos intra canal, es decir se colocan en el interior del canal auditivo. Los audífonos invisibles son aparatos electrónicos muy compactos en los que condensa toda la tecnología necesaria para recuperar la audición de la forma más natural posible.
¿Cómo funciona exactamente un audífono invisible?
Como cualquier audífono su función es amplificar y transmitir el sonido al oído.
Los audífonos invisibles se colocan introduciendo el aparato suavemente en el canal auditivo con una orientación concreta. En el extremo que queda hacia fuera cuentan con un hilo extractor que permite sacarlo del canal auditivo para su limpieza o para cambiar la pila. Al ser aparatos muy pequeños sus pilas también lo son, por lo que deberemos hacernos a su uso y manipulación.
Los audífonos invisibles están recomendados para pérdidas de audición de leves a moderadas. Al estar colocado cerca del tímpano permiten utilizar la amplificación natural del pabellón auditivo.
Tanto inicialmente como en la etapa de adaptación, el audioprotesista ajustará el nivel de amplificación acorde la capacidad auditiva del paciente. Igualmente realizará las configuraciones necesarias según cada caso particular.
Los audífonos invisibles, como cualquier otro tipo de audífono, para tener un buen funcionamiento requieren de un correcto mantenimiento y limpieza. Además, en este caso particular, al estar en contacto permanente con la cera del conducto auditivo, la limpieza será especialmente importante; tanto para evitar la obstrucción del micrófono o la salida de sonido como para que no se deterioren los componentes electrónicos. Muchos cuentan además con un filtro anticerumen.
La elección del audífono invisible dependerá del grado y tipo de pérdida auditiva. Para ayudarle a elegir el más adecuado a sus necesidades concretas debe acudir a un centro auditivo de confianza y contar con la experiencia de un profesional que le asesore correctamente.